7+1 errores de email marketing que la mayoría de “expertos” recomienda y matan ventas

Enviar correos electrónicos a clientes o potenciales clientes es una estrategia muy común en negocios y emprendedores de todo el mundo.

El email marketing puede ser muy rentable, pero no siempre funciona.

La obsesión de conseguir leads y aumentar la lista de suscriptores lleva en muchas ocasiones a cometer ciertos errores que en lugar de generar ventas espantan a los suscriptores.

Lo más sorprendente es que algunos de esos “fallos” son precisamente consejos que dan un montón de emprendedores que supuestamente triunfan con sus negocios online.

Si ya has probado de todo y no te funciona, te recomiendo que empieces a cambiar de táctica y tomes nota de estos tips que contradicen la opinión general.

En esta entrevista con Isra Bravo, uno de los referentes en email marketing en España, puedes escuchar muchas de estas técnicas poco efectivas.

1. Personalizar todos los correos

¿Te suena el Hola %FIRSTNAME%?

Hace unos años, cuando no estábamos tan acostumbrados a recibir este tipo de correos, nos hacía mucha ilusión.

De hecho, dirigirte a una persona por su nombre genera cercanía y es justo lo que hay que conseguir con un email.

Pero una cosa es querer ser cercano y otra es ser antinatural.

Un gran porcentaje de tus suscriptores, especialmente si son también emprendedores digitales, sabe de sobra que no tienes ni idea de quién está detrás leyendo. Y mucho menos sabes su nombre.

Las herramientas de email marketing te permiten esa personalización y raro es quién no la utiliza.

Lo que ocurre es que es un cantazo cuando empiezas con algo así:

 “¿Qué tal estás, María?

Espero que no te sientas solo por no haberte escrito en las últimas dos semanas.

¿María se siente solo?

Estas incoherencias se pueden evitar utilizando palabras que aludan a ambos géneros (Espero no haberte decepcionado por no haberte escrito….), pero es habitual que se cuele alguna.

Estas son las dos razones principales por las que es mejor no obsesionarse con personalizar siempre los correos que escribes a tus suscritores:

  • Queda antinatural y falso
  • Se producen incoherencias

El mejor momento para personalizar un email o una carta es cuando sabes a quién te estás dirigiendo.

2. Enviar a tus lectores a redes sociales

El nombre y la dirección de correo que damos en las listas a las que nos suscribimos es algo privado.

De hecho, la política de privacidad te obliga a hacer el famoso doble opt in para no infringir la ley y dejar claro que damos el consentimiento para usar nuestros datos.

Entonces, ¿qué sentido tiene que una vez que nos dejan esos datos, les llevemos a un espacio lleno de gente?

Es como si después de una primera cita, le preguntas a esa persona su nombre.

Hay un orden lógico.

Además, cuando entramos en una red social empiezan a salir notificaciones, anuncios, mensajes y nuestra atención se dispersa.

Perdemos el foco.

Seguro que más de una vez has abierto una red social y te has olvidado de lo que estabas buscando por la cantidad de “ruido” que había dentro.

Incluir los enlaces a nuestras redes sociales puede hacer que el lector se despiste y no realice la acción que tú quieres.

Si a una persona o marca le interesa irá directamente a buscarte cuando quiera. No necesitas recordárselo en cada con enlaces o iconos debajo de la firma.

3. Incluir demasiadas llamadas a la acción

Igual que ocurre en una página de ventas o en una web, cuando vemos demasiados botones, no sabemos dónde pinchar.

Cuantas más opciones tenemos, más difícil es decidir.

En los emails, hay que pensar bien qué queremos conseguir del lector con una llamada a la acción clara.

O dos como mucho.

Seguramente tú también recibes correos con cinco o seis enlaces, incluso más que te llevan a diferentes redes sociales, un artículo de blog, una página de ventas y una encuesta.

Esto se hace cuando no tenemos segmentadas las listas y tenemos diferentes avatares para intentar captar la atención de todos en un mismo email. 

Es preferible enviar más correos a las distintas listas que querer atraer a todos a la vez.

¿Y si solo tengo una lista?

Me recuerda a cuando le preguntas a un cliente que te pide el copy de una web que a quién se quiere dirigir y te contesta que a todo el mundo.

En ese caso, puedes etiquetar a tus contactos en función de un interés, concreto o de su procedencia (si se ha suscrito a tu newsletter, ha descargado un lead magnet, ha entrado por un anuncio….)

4. Mostrar apariencia de folleto publicitario

En las tiendas online enviar correos con imágenes o banner de ofertas es muy típico.

En esos casos, puede que funcione, pero eso no quiere decir que haya que limitarse a una foto sin nada de texto.

Incluir imágenes, gifs animados, iconos… dependerá del público al que te diriges y del tono y lenguaje que utilices en otros canales. Los emoticonos tendrán sentido si sueles recurrir a ellos o tu audiencia conecta con esa forma de comunicación.

Pero no cargues tus correos de colorines ni trates de crear un diseño impecable, porque esa perfección suena a publicidad.

Los emails que mejor suelen funcionar no llevan colores, fotos ni emoticonos.

5. Mal uso de las postdatas

Esas últimas frases que añadimos al final de un correo suelen funcionar muy bien.

Los emprendedores digitales conocen su eficacia y las incluyen en todos sus emails.

Pero uno de los errores de email marketing que muchos cometen es utilizarlas de forma incorrecta.

Normalmente, esas postdatas incidirán en la llamada a la acción con un enlace hacia el lugar donde queremos llevar al lector.

Pero también puedes usarlas para generar expectación antes de enviar el siguiendo correo o sobre un nuevo productos que estás a punto de lanzar.

Si quieres incluir dos llamadas a la acción, hazlo con dos postdatas.

De esa forma, el usuario tiene claro lo que debe hacer y en qué enlace clicar.

6. Tratar de mostrar la perfección

Todos cometemos errores.

Y tratar de disimularlos o de contar solo la parte bonita de tu negocio, no resulta atractivo, sino todo lo contrario.

Aunque así fuera, las personas nos identificamos con los problemas de los demás.

El hecho de reconocer un error o un fracaso hace que te consideren “real” y mucho más cercano. Porque la perfección de la que algunos presumen no existe.

Como suele decirse, no es oro todo lo que reluce.

Aprovecha el email marketing para conectar con tu audiencia a través de historias que conecten directamente con sus emociones.

7. Disimular regalando mucho valor

¿Para qué te comunicas con tu lista?

Supongo que tienes un negocio y como todo negocio, necesitas clientes.

Así es que, no trates de disimular en tus correos porque ese error de email marketing te está haciendo perder ventas.

Es mucho mejor ser transparente.

Tus suscriptores saben que vives de ello y que vendes productos o servicios que estás poniendo a su disposición.

El que se moleste tienen libertad para irse cuando quiera.

Así es que, déjate de regalar y de ofrecer auditorías gratis o contenido de muuuchooo valor si no piensas vender nada.

No digo que no aportes, que no envíes consejos útiles, que no crees contenido para tu audiencia.

Lo que digo es que vendas. O al menos, lo intentes.

¿Cómo?

Pues incluyendo siempre en tus correos una llamada a la acción que vaya enfocada al objetivo de ese email.

Porque debes tener un objetivo. No escribas a lo loco.

8. Escribir de “higos a brevas”

La frecuencia es una de las dudas más frecuentes para los que empiezan en email marketing.

Algunos lo hacen cuando se acuerdan.

Otros una vez a la semana.

Unos empiezan mandando muchos correos, y poco a poco, van reduciendo sus envíos.

Los hay que solo escriben cuando lanzan un producto o tienen una oferta.

Y cada vez son más los que están aprovechando el email marketing para comunicarse a diario con sus potenciales clientes.

Es una manera rápida de generar confianza y de establecer una comunicación directa con tu audiencia.

Siempre y cuando, tus emails sean entretenidos, conecten con sus necesidades y empaticen de alguna forma con ellos, relacionando los contenidos que compartes con tu negocio, es recomendable escribir con mucha frecuencia.

Todos estos consejos irán acompañados de un buen contenido que sea relevante para tus potenciales clientes. 

Mucha gente cree que hay que tener muchas ideas, ser muy creativo o tener una vida activa para hacer email marketing. Pero en realidad, cualquiera puede contar historias de lo que sucede a su alrededor y vincularlo con sus productos o servicios. 

 

Y ahora cuéntame,

¿qué te resulta más complicado a la hora de hacer email marketing? Deja un comentario y comparte la estrategia que mejor te funciona para ayudar a los emprendedores que pasan por aquí.

Esta entrada tiene 7 comentarios

  1. Gustavo Woltmann

    Que gran articulo a veces pensamos que hacemos lo correcto pero en realidad no. Gracias por la informacion.

  2. Álex Novás

    Muchas gracias, Gustavo. Nos alegra que te haya servido. Un saludo.

  3. Gustavo Woltmann

    Me parecen muy sensatas tus recomendaciones de lo que «no» hay que hacer. Actualmente estoy trabajando en una campaña que aplica este método, trataré de mejorarlo con tus consejos Álex, saludos.
    -Gustavo Woltmann.

  4. Eva Godoy

    excelente información y recomendaciones, hay que colocarlas en practica. saludos!

  5. Eva Godoy

    gracias por los consejos, voy aplicarlo en mi trabajo. saludos!

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